(@alianzahistory)
Con una leve mejora en la segunda
parte del encuentro, Alianza Lima cayó 2-1 frente a Cienciano y vive un presente nada favorable. Sumado a las bajas que
afectaron el accionar en el partido, toca una visita a Montevideo que puede cambiar para bien o peor la situación.
Los cusqueños complicaron a Butrón en su regreso al arco. La falta de ritmo y las licencias defensivas de Alianza fueron determinantes en una tarde poco feliz para el portero. Fue así que Luis Trujillo, con toda la libertad del mundo, marcó el primero, ante un Leao que se vio sorpresivamente superado por el efecto de la pelota, algo increíble para un jugador de su experiencia.
Con poco se vio la mejor jugada colectiva de Alianza en todo el año. Una buena conexión entre Patricio Rubio y Oslimg Mora, previo pase largo de Carlos Montoya, generó un centro que tuvo como destinatario a Anthony Rosell, quien marcó el 1-1.
Como se menciona al inicio, Alianza
salió con otra cara en los últimos 45 minutos, aunque apenas con ataques tibios de Kevin
Ferreyra. A pesar de controlar este tramo del juego, la contundencia nunca se vio reflejada en el arco de Cienciano. Como muestra de ello, una jugada en la que tres atacantes íntimos quedaron en ventaja terminó con Ferreyra en mala posición y definiendo exigido.
La falta de elaboración de juego era
notoria. La ausencia de Miguel Cornejo le quitaba ese toque de
fútbol al equipo, pues no había quién se haga cargo del medio campo. Motivo suficiente para dificultar la llegada con claridad al arco rival. Además, la impericia de Sánchez resulta ya exasperante a estas alturas del año.
Algo imperdonable es la pasividad para la marca en la era Salas. En el segundo gol de Cienciano nadie incomodó, desacomodó o siquiera fastidió a José Cuero, un error tan clamoroso como las declaraciones posteriores de Mario Salas, quien (creemos en defensa anímica del plantel) manifiesta sentirse tranquilo luego de este encuentro.
De esta manera se cierra un espantoso Apertura, a cinco puntos de la zona de descenso con un plantel que inició a grandes luces y hoy -a causa de pésimas decisiones dirigenciales y, por supuesto, de Salas- es apenas un remedo. Se habla de un posible retorno de Federico Rodríguez, hecho que podría dejar en claro un mal cálculo del chileno. Ojalá en Montevideo no se halle la sepultura definitiva.
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